miércoles, 2 de junio de 2010


Las aletas con forma de abanico del pez león muestran un aspecto delicado, pero pueden ser mortales.






Veneno



Pez-león fotografiado en el Suma Aqualife Park - Japón

El veneno de los Peces-león es inoculado a través de espinhos localizados en las regiones dorsal, pélvica y anal. Generalmente poseen de 12 a 13 espinhos dorsais, 2 pélvicos y 3 anais. Cada espinho posee dos glândulas que producen y almacenan veneno. Los peces-león también poseen espinhos peitorais, sin embargo estos no poseen glândulas de veneno.

La potencia del veneno varía de acuerdo con la especie y tamaño del pez-león. Los principales efectos son: dolor intenso localizada, seguida de edema local, pudiendo también la víctima sentir náuseas, tontería, flaqueza muscular, respiración ofegante y dolor de cabeza.

El veneno de los peces-león es constituido de proteínas termosensíveis, que son vulnerables al calor y se desnaturam fácilmente. Los primeros socorros se constituyen en la imersão del local afectado en agua caliente (43-45ºC) por 30 a 40 minutos o hasta el dolor disminuir.

No hay comentarios:

Publicar un comentario